En esta ocasión, nos adentramos en el mundo de 'Firelight', el primer libro de una trilogía que mezcla elementos de fantasía, romance y vida adolescente.
Titulo: Firelight
Autor: Sophie Jordan
Páginas: 296
Un secreto ancestral.
Ella y él son enemigos mortales.
Un amor imposible los quema...
Jacinda no es una chica común. Desciende de dragones que pueden adquirir forma humana y ocultarse de los predadores que los persiguen. Su clan la tiene bajo control, ya que ella es la última de su especie: una bella y poderosa draki de fuego, comprometida con el príncipe heredero. Pero un encuentro fortuito obliga a Jacinda y a su hermana gemela a huir de su comunidad y adentrarse en el mundo de los humanos. Ella luchará por evitar que sus instintos se apaguen, aunque esto signifique acercarse a su adversario, un enemigo tan atractivo como peligroso, capaz de encenderla con solo mirarla.
"¿Qué harías si las vueltas de la vida te llevan a enamorarte de quien se supone es tu peor enemigo?”
Jacinda es una draki de fuego, una dragona capaz de adoptar forma humana, y es la última de su especie. Está comprometida con el príncipe de su comunidad y vive en un clan al que considera su familia, pero estos son muy estrictos y controladores. Tras un incidente, su madre decide escapar con Jacinda y su hermana hacia una nueva vida entre los humanos. Allí conoce a Will, el chico más codiciado del colegio y miembro de un clan de cazadores de dragones, quien guarda un secreto que Jacinda deberá descubrir.
Este libro en un principio me pareció atrapante y prometedor, me generó expectativas desde el primer momento. Sin embargo, a medida que avanzaba la historia, noté que se volvía repetitiva.
Si bien, el centro de la historia podría decirse que es el amor prohibido que surge entre Jacinda y Will, es ella misma quien lo tilda de prohibido ya que mas nadie esta tan adentrado en su relación como para imponerles un fin a la relación. Es más grande la ansiedad que le genera que alguien se entere de su relación que la prohibición real y existente. Me pareció muy forzada la manera en la que quiere imponerse esa prohibición, aunque llegando al final la situación empieza a cambiar. Además, de que su romance va demasiado rápido, tanto, que no genera expectativas ni intriga de qué puede pasar.
La lectura fue muy rápida. Pude mantener un ritmo de lectura muy ligero ya que es de fácil lectura. Aunque siento que la trama podría haberse desarrollado mucho más, que podría haber tenido otra vuelta de rosca. Los personajes parecían interesantes pero muy forzados, todos eran estereotipados. Las escenas siempre se desarrollan en los mismos lugares, no hay variaciones prácticamente y a casi todas las sentí muy iguales. Por ejemplo, apenas desarrolla la comunidad de dragones en donde vivía Jacinda y su familia, eso que es lo que percibí como más interesante me hubiera gustado que se desarrolle más.
La protagonista se centra en su deseo de estar con Will y en sentirse incomprendida por su madre y hermana, repitiendo constantemente esta idea durante todo el libro. En general, el libro está plagado de clichés. Sumando que la protagonista esta constantemente repitiendo que estar cerca de Will está mal, que ya no lo hará, pero… adivinen qué, sí, eso no sucede… a la mínima aparición de él ahí esta ella de nuevo a sus pies. Y, por otro lado, que nadie la entiende, que ella es diferente, no sabe cómo hacer que su familia la comprenda, etc.
Lo que más me gustó y me pareció bastante original fue cuando relata acerca de su forma de ser draki y todo lo que eso conlleva. Y, lo que se supone es el centro de la historia, o sea, la relación de Jacinda con Will, no me gustó del todo.
El final de la historia lo sentí demasiado rápido, como si hubiera faltado al menos un capítulo o dos más de desarrollo. Aquí se descubre un secreto de Will, me pareció un poco descolocado ya que no había tantos indicios del mismo a lo largo del libro. Esperaba una resolución diferente al término del libro.
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